martes, 17 de enero de 2012

Un deseo en Puerto Rico


Sin pensarlo antes descubrí que en mi cielo de hoy está la estela que dejó la estrella fugaz que vi la noche anterior. El deseo fue claro: que este año sea próspero y me vaya bien en todo.

Estrella fugaz que en la noche vuelas
permíteme pedir otro deseo
por si acaso mañana no te veo:
Que mis zapatos no gasten sus suelas,

que mi boquita conserve sus muelas,
que mi amada me envíe un correo,
que sea un héroe como Perseo
y que me sonrían las habichuelas.

Pero si no me permites tal lujo,
si pido lo infinito como el huevo,
ven, déjame hacerte un dibujo

y del primer deseo hacer relevo.
Sácame por favor de este embrujo
y déjate ver mañana de nuevo.

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